Guía práctica para entender la factura de la luz en 2025
La factura de la luz resume lo que has consumido y todo lo que te cobran por la electricidad en casa. Aunque el formato cambia según la compañía, casi todas incluyen los mismos conceptos: potencia, consumo, impuestos y alquiler del contador. En esta guía te mostramos cómo identificar cada uno y entender por qué pagas esa cantidad.
Desglosando y calculando una factura de la luz
Cuando llega la factura de la luz, lo normal es ir directo al total a pagar. Sin embargo, ese importe es la suma de varios conceptos que no siempre se entienden a la primera.
En este apartado vamos a desglosar una factura real, punto por punto, para que sepas qué te están cobrando y por qué.
1) Datos generales de la factura

En la parte superior de la factura se concentran los datos clave para identificar el recibo y tener una visión rápida de lo que vas a pagar. Es lo primero que conviene revisar para comprobar que la factura corresponde a tu vivienda y al periodo correcto.
- Total de la factura: es el importe final, desglosado por partes, que se cargará en tu cuenta bancaria. En este caso, 43,97 €.
- Periodo de facturación: indica los días concretos que se están cobrando (del 04/11/2025 al 04/12/2025), con un total de 30 días facturados. En las facturas de luz, el periodo de facturación suele ser de 30 días, mientras que las facturas de gas natural se emiten cada dos meses.
- Consumo en el periodo: la electricidad utilizada durante ese mes, expresada en kWh. Aquí ha sido de 98 kWh.
- Fecha de cobro: día en el que se realizará el cargo en cuenta (09/12/2025).
Justo debajo suelen aparecer los datos identificativos del suministro, que conviene revisar al menos una vez:
- CUPS: es el “DNI” de tu punto de suministro y no cambia aunque cambies de compañía. El Código CUPS lo entrega la distribuidora de luz de tu zona geográfica, y es único en cada vivienda.
- Número de contrato y de factura: referencias internas de la comercializadora, útiles para gestiones o reclamaciones.
- Dirección de suministro: confirma que el recibo corresponde exactamente a la vivienda o local correcto.
- Fecha de emisión: día en el que la factura ha sido generada por la compañía.
Además, la factura incluye un gráfico con el histórico de consumo del último año, donde se puede ver de un vistazo cómo ha variado el uso de electricidad mes a mes.
- Las barras naranjas muestran el consumo real registrado por el contador.
- En caso de no haber lectura, la compañía puede mostrar consumos estimados, aunque no es lo habitual, ya que los contadores de luz inteligentes conforman más del 99 % del parque de equipos de medida.
- La línea horizontal indica el consumo medio, lo que permite comparar rápidamente si un mes ha sido más alto o más bajo de lo común.
Este gráfico es útil para detectar picos de consumo, cambios en los hábitos (por ejemplo, uso de calefacción o aire acondicionado) y para comprobar si el gasto eléctrico se mantiene estable a lo largo del tiempo.
¿Quieres saber cuánto deberías pagar por tu consumo?
Puedes utilizar nuestra calculadora de consumo de electricidad y obtener una estimación orientativa de tu gasto eléctrico.
2) Información de tus consumos y potencias

Antes de entrar en los importes económicos, la factura muestra la información técnica del suministro: cuánta electricidad se ha consumido y qué potencia está contratada. La distribuidora, cuando obtiene tus consumos de electricidad, se los pasa a tu comercializadora y esta ya te factura en base a las condiciones de tu contrato.
Estos datos son la base sobre la que se calculan todos los importes posteriores.
Consumo eléctrico por periodos
En las tarifas actuales (2.0TD), el consumo se divide en tres periodos según los horarios de la luz: punta, llano y valle. En la factura se indica la lectura del contador y el consumo realizado en cada uno.
- Lectura actual y anterior: valores registrados por el contador en cada periodo.
- Consumo del periodo: diferencia entre ambas lecturas, expresada en kWh.
En este ejemplo, el consumo total se reparte entre los tres periodos, lo que permite ver en qué franjas se concentra el gasto eléctrico.
Datos técnicos de potencia
A la derecha del bloque aparece la información relacionada con la potencia eléctrica contratada en la vivienda:
- Potencia contratada: es la potencia máxima que puedes usar a la vez sin que salte el interruptor. En este caso, 4,4 kW tanto en punta (P1) como en valle (P2).
- Potencia máxima demandada: indica el pico real de potencia utilizado durante el último año. Sirve como referencia para saber si la potencia contratada es adecuada o se está pagando de más. En este ejemplo, aunque la potencia contratada es de 4,4 kW, el máximo registrado ha sido de algo más de 3 kW.
Esto significa que, en la práctica, nunca se ha llegado a utilizar toda la potencia contratada. Es parecido a tener una tarifa móvil con datos ilimitados cuando en realidad solo consumes unos pocos gigas al mes: tienes margen de sobra, pero lo pagas todos los meses.
¿Qué hacer si te pasa esto?
Si estás en este caso, bajar la potencia contratada te ayudará a reducir la parte fija de la factura, que pagas todos los meses consumas luz o no consumas.
Calcula tu potencia óptima
3) Término fijo o término de potencia

El término fijo, también conocido como término de potencia, es la parte de la factura que se paga siempre, independientemente de que se consuma mucha o poca electricidad. Corresponde al coste por estar conectado a la red eléctrica y por disponer de una potencia determinada.
Dentro de este importe se incluyen costes regulados (peajes y cargos por potencia), que se destinan a la distribuidora de luz asignada a tu zona geográfica y al sistema eléctrico, así como la cuota de comercialización, que es la parte que percibe la comercializadora.
En la factura aparece desglosado por periodos, ya que con la tarifa 2.0TD se puede tener una potencia diferente en cada franja. En nuestro ejemplo, el total a pagar en cada periodo es:
- Periodo 1 (punta): 9,37 €
- Periodo 2 (valle): 9,37 €
El cálculo del término fijo es sencillo y siempre sigue la misma fórmula: Potencia contratada × días facturados × precio del kW día
En este ejemplo, Repsol aplica el mismo precio en ambos periodos:
- 4,4 kW × 30 días × 0,070958904 €/kW día = 9,37 € por periodo. Al sumar ambos periodos, el término fijo total asciende a 18,74 €.
Recuerda
Este importe no depende del consumo en kWh. Aunque no utilices electricidad durante el mes, el término fijo se seguirá cobrando mientras el suministro esté activo.
4) Término de energía o consumo

El término de energía es la parte variable de la factura de la luz, ya que depende directamente de la electricidad que se consume durante el periodo de facturación. Cuantos más kWh se utilicen, mayor será el importe de este apartado.
Como vemos, en la factura aparece el consumo total del periodo y el precio del kilovatio hora (kWh) aplicado:
- Consumo facturado: 98 kWh
- Precio del kWh: 0,1499 €/kWh
De esta forma, para hacer el cálculo de lo que hay pagar solo por la electricidad consumida, será tan fácil como multiplicar el consumo realizado durante el periodo de facturación por el precio del kWh de la tarifa que tenemos contratada. En este caso: 98 kWh x 0,1499 €/kWh = 14,69 €
Conviene tener en cuenta que dentro del término de energía no todo es precio de la luz “puro”. Una parte del importe corresponde a peajes y cargos regulados, que sirven para financiar el uso de las redes eléctricas y otros costes del sistema, y que se pagan a la distribuidora y al sistema eléctrico.
El resto del importe del término de energía corresponde al coste de la electricidad y al margen de la comercializadora, según la tarifa contratada.
En este caso, la factura corresponde a una tarifa con un único precio del kWh las 24 horas, por eso todo el consumo aparece agrupado en un solo periodo (P1).
Sin embargo, algunas compañías de luz baratas, incluso con tarifas de precio fijo, desglosan el consumo realizado en punta, llano y valle a nivel informativo, aunque el precio del kWh sea exactamente el mismo en todas las franjas.
Cuando se tiene una tarifa con discriminación horaria, el desglose por periodos sí es obligatorio: en el término de energía aparecerán los kWh consumidos y el precio aplicado en cada franja, ya que el coste de la electricidad varía según la hora del día.
En este sentido, si aún tienes dudas sobre qué es P1, P2 y P3 en electricidad, te recomendamos que leas nuestro artículo dedicado.
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5) Otros conceptos de la factura

Bajo el apartado de otros conceptos se agrupan importes que no dependen ni del consumo de electricidad ni de la potencia contratada, pero que también forman parte del coste final de la factura.
- Financiación del Bono Social: es una cantidad fija que pagan todos los consumidores, estando actualmente a 0,012742 €/día, independientemente de que sean beneficiarios o no. Sirve para financiar los descuentos del bono social a personas y hogares en situación de vulnerabilidad y se paga con todas las compañías, independientemente de que estés en el mercado regulado o en el mercado libre.
- Equipos de medida: corresponde al alquiler del contador cuando este no es propiedad del consumidor. El precio está entre 0,81 € y 1,36 € al mes y se cobra por día en función del tipo de contador instalado.
¿Cómo veo en la factura si tengo un servicio de mantenimiento contratado?
Normalmente, los servicios de mantenimiento de luz, gas o climatización se incluyen en este apartado de la factura. Podrás verlo con el propio nombre del mantenimiento, como Protección 360 Plus de Endesa, Servielectric Xpress de Naturgy o Tu Asistente 24h Plus de Repsol, entre otros.

6) Impuestos en la factura de la luz

Además de la potencia y la energía consumida, la factura de la luz incluye una serie de impuestos regulados que se aplican sobre distintos conceptos del recibo.
Impuesto sobre la electricidad: se aplica sobre la suma del término fijo y el término de energía, antes de impuestos. En este ejemplo, la base es 33,81 €, que resulta de sumar:
- 18,74 € del término fijo
- 14,69 € del término de energía
Sobre esa base se aplica el tipo vigente del 5,11%, lo que da como resultado 1,73 € por este impuesto.
- IVA de la luz: se calcula después y se aplica sobre el total antes de IVA, es decir, incluyendo ya el impuesto eléctrico. Actualmente, el IVA de la electricidad tiene un gravamen general del 21%. En este caso, al aplicar ese porcentaje sobre el importe correspondiente, el IVA asciende a 7,63 €.
De esta forma, el total a pagar en este recibo eléctrico es de 43,97 €.
7) Datos del contrato y del suministro (reverso de la factura)

En el reverso de la factura se incluyen datos contractuales y técnicos del suministro. No afectan directamente al importe mensual, pero son clave para identificar tu contrato, saber con quién tienes cada responsabilidad y realizar gestiones o reclamaciones.
- Comercializadora: empresa con la que tienes el contrato y que te emite la factura. En este caso, Repsol Comercializadora de Electricidad y Gas.
- Tipo de tarifa: indica si estás en mercado libre o en mercado regulado con la tarifa de luz por horas (PVPC)
- Distribuidora: empresa responsable del contador, las lecturas y la red eléctrica de tu zona. Aquí es UFD – Distribución Unión Fenosa, del Grupo Naturgy.
- Peaje de transporte y distribución: identifica el tipo de acceso a la red (2.0TD), que determina cómo se reparten los costes regulados y los periodos horarios.
- Potencia contratada: potencia máxima disponible en cada periodo (punta y valle), usada para calcular el término fijo.
- Fecha de fin de contrato: útil para saber cuándo se renueva la tarifa o si existen condiciones especiales.
- Datos de pago: titular del contrato, forma de pago, número de factura y fecha de cobro.
También aparecen vías de contacto diferenciadas: la comercializadora para facturación y contratos, y la distribuidora para averías en la red de distribución, cortes de suministro o problemas con el contador.
¿Qué puedes hacer para pagar menos en tu factura de la luz?
Una vez sabes interpretar tu factura, el siguiente paso lógico es identificar dónde puedes ahorrar. Aunque parte del recibo está regulada, hay varios elementos sobre los que sí puedes actuar para reducir el importe final.
- Ajustar la potencia contratada: si tu potencia máxima demandada está muy por debajo de la potencia contratada, es probable que estés pagando de más todos los meses.
- Revisar el precio del kWh: comparar tarifas puede ayudarte a encontrar un precio más bajo por la electricidad que consumes.
- Aprovechar mejor los horarios baratos: en tarifas con discriminación horaria, desplazar consumos a las horas valle reduce notablemente el coste.
- Eliminar servicios innecesarios: revisa si tienes mantenimientos u otros servicios que no utilizas y que encarecen la factura.
Si quieres profundizar en estas medidas y ver ejemplos prácticos, te lo explicamos paso a paso en nuestro artículo sobre cómo ahorrar energía y reducir la factura de la luz.
Preguntas frecuentes sobre la factura de la luz
¿Qué hago si mi factura viene con consumo estimado?
Lo primero es comprobar si en el apartado de consumos aparece “estimado” en lugar de “real”. Las lecturas del contador son responsabilidad de la distribuidora, aunque la factura te la emita la comercializadora.
Si el consumo es estimado, en la siguiente factura suele aparecer una regularización automática cuando la distribuidora facilita una lectura real. Si el estimado se repite o no cuadra con tus hábitos, puedes contactar con tu comercializadora para que traslade la incidencia a la distribuidora o, si está habilitado, aportar tú mismo la lectura del contador.
¿Por qué pago término fijo aunque apenas consuma luz?
Porque el término fijo (o de potencia) es un coste por tener el suministro activo y estar conectado a la red, además de la comercialización. Por eso se cobra todos los días del periodo facturado, consumas mucho, poco o incluso 0 kWh.
¿Por qué mi factura sube si he consumido lo mismo que otros meses?
Puede subir aunque el consumo sea parecido si cambia el precio del kWh de tu tarifa, si aumenta el número de días facturados, si se regulariza una lectura estimada anterior o si tienes servicios añadidos (mantenimiento) que se cobran cada mes. También influyen impuestos y pequeños ajustes de redondeo.
¿Cómo sé si un cargo es de la comercializadora o de la distribuidora?
Aunque todo se cobra a través de la comercializadora, en la factura hay conceptos que corresponden a la distribuidora. En concreto, el alquiler del contador y la parte regulada de la potencia y la energía (peajes y cargos) son costes de la distribuidora.
La comercializadora es quien te emite la factura y añade su margen de comercialización, además de cobrar la energía según la tarifa contratada y, si los tienes, los servicios adicionales. Si en el concepto aparece “equipos de medida”, “alquiler del contador” o referencias a peajes, se trata de costes regulados asociados a la distribuidora.