Si estás aquí, normalmente es por uno de estos motivos: (1) quieres saber qué potencia contratar para tu casa, (2) quieres saber cuánto cuesta la potencia porque crees que pagas de más en la parte fija de la factura o (3) te saltan los plomos y necesitas aumentar la potencia.
En este artículo te lo explicamos de forma clara, con ejemplos, tablas orientativas y una calculadora para ayudarte a tomar la mejor decisión.
La respuesta “correcta” depende de lo que uses a la vez (horno + vitro + aire + lavadora, etc.) y del tamaño de tu vivienda, pero para que no tengas que leer medio internet, aquí tienes una guía rápida:
Para que puedas validar rápidamente estas recomendaciones generales, la siguiente tabla muestra rangos orientativos de potencia eléctrica según el tamaño de la vivienda y el nivel de equipamiento.
| Equipamiento | Hasta 65 m² | 65–85 m² | 85–140 m² | Más de 140 m² |
|---|---|---|---|---|
| Básico | 3 kW | 3,5 kW | 4,5 kW | 5,8 kW |
| Medio | 3,5 kW | 4,5 kW | 5,8 kW | 6,9 kW |
| Alto | 4,5 kW | 5,8 kW | 6,9 kW | 8 kW |
Equipamiento básico: electrodomésticos esenciales y uso poco simultáneo (frigorífico, iluminación, TV, microondas). Equipamiento medio: vivienda estándar con horno, vitrocerámica, lavadora o lavavajillas y aire acondicionado puntual. Equipamiento alto: varios electrodomésticos funcionando a la vez, aire acondicionado frecuente, secadora, termo eléctrico u otros consumos intensivos.
Estas potencias son orientativas y se basan en recomendaciones comunes de distribuidoras y comercializadoras eléctricas, en criterios técnicos utilizados por electricistas al dimensionar instalaciones domésticas y en tablas prácticas empleadas por organismos de consumo como IDAE u OCU.
Si quieres saber tu potencia eléctrica ideal, podrás conocerlo en 3 minutos gracias a nuestra calculadora gratuita de potencia eléctrica.
Calculadora de potencia online
Contrata la potencia que necesitas, ni más, ni menos
Cuando se habla de potencia mínima de luz, conviene distinguir entre dos conceptos distintos: el mínimo que permite usar la vivienda con normalidad y el mínimo que permite la instalación eléctrica según el boletín eléctrico o el contador.
Contratar menos potencia de la necesaria no es peligroso, pero sí poco práctico: el Interruptor de Control de Potencia (ICP) cortará el suministro cuando se supere la potencia contratada, obligándote a reconectar de forma frecuente.
Muchas comercializadoras, por razones de seguridad, exigen contratar una potencia eléctrica mínima de 2 kW.
Según el último panel de hogares de la CNMC (primer semestre de 2025), la potencia más habitual en las viviendas españolas está entre 4 y 6 kW, rango en el que se sitúa aproximadamente el 43 % de los hogares.
Además, un 27,8 % de los hogares tiene contratada una potencia baja (de 0 a 3 kW) y cerca de un 22 % reconoce no saber qué potencia tiene contratada, lo que indica que muchas viviendas podrían estar pagando de más sin ser conscientes de ello.
Saber qué potencia contratar no consiste en elegir un número al azar ni en sumar todos los electrodomésticos de la vivienda. La clave está en identificar qué aparatos pueden funcionar a la vez y durante cuánto tiempo, algo que varía mucho según el tamaño de la casa, el número de personas y los hábitos de consumo.
Por eso, aunque las tablas orientativas y los rangos habituales sirven como primera referencia, en muchos casos conviene afinar el cálculo para evitar dos situaciones muy comunes: contratar menos potencia de la necesaria y sufrir cortes frecuentes porque te salten los plomos, o contratar más potencia de la que realmente se usa y pagar de más cada mes.
A continuación tienes los métodos más comunes para calcular la potencia eléctrica que necesitas, ordenados de mayor a menor precisión, para que puedas elegir el que mejor encaje con tu caso.
Utilizar nuestra calculadora de potencia eléctrica es la forma más sencilla de obtener una recomendación ajustada sin necesidad de hacer cálculos técnicos. Este tipo de herramientas tienen en cuenta no solo el tamaño de la vivienda, sino también qué electrodomésticos utilizas y cuáles pueden coincidir en el tiempo.
Por eso, si buscas una recomendación rápida, pero razonable, este suele ser el método más equilibrado entre precisión y facilidad.
El cálculo manual consiste en identificar los electrodomésticos que pueden funcionar de forma simultánea y sumar sus potencias nominales.
No se trata de saber cuántos kWh consume una casa al mes, sino de identificar qué electrodomésticos pueden funcionar a la vez y cuánta potencia requiere cada uno en ese momento.
| Electrodoméstico | Potencia aproximada |
|---|---|
| Televisión | 150 – 400 W |
| Frigorífico / nevera | 350 – 1 000 W |
| Microondas | 900 – 1 500 W |
| Vitrocerámica / placa | 900 – 2 100 W |
| Horno eléctrico | 1 200 – 2 500 W |
| Lavadora | 1 500 – 2 200 W |
| Lavavajillas | 900 – 2 300 W |
| Aire acondicionado | 900 – 2 000 W |
Rangos orientativos de potencia nominal de electrodomésticos durante su funcionamiento activo, basados en guías de consumo y referencias técnicas habituales. Los valores pueden variar según modelo, eficiencia y uso real. Para pasar de vatios (W) a kilovatios (kW), divide entre 1.000.
Una vez hecha esa suma, conviene añadir un pequeño margen de seguridad, generalmente 1 kW de más, para cubrir picos de arranque o consumos imprevistos. Este método puede ser útil como referencia, pero requiere conocer bien los consumos de cada aparato y no siempre refleja el uso real del día a día.
Para calcular la potencia a contratar no se suman todos los electrodomésticos de la casa, sino solo los que sean más probables que estén utilizándose simultáneamente:
Calcula tu potencia óptima
En determinados casos, recurrir a un electricista puede ser la opción más adecuada, especialmente si la instalación es antigua. De esta forma, un técnico puede evaluar la instalación y confirmar qué potencias son viables desde el punto de vista eléctrico.
Por su parte, las distribuidoras de luz también orientan sobre la potencia a contratar, ya que registran las potencias máximas que has demandado en el último mes, año y hasta por días.
Lo mejor es que contactes con tu distribuidora y les expliques el problema, así ellos, con toda la información que tienen sobre tu punto de suministro, podrán ayudarte a elegir la mejor opción.
Si no sabes cuál es tu distribuidora eléctrica, aquí puedes comprobarlo:
¿Cual es mi distribuidora?
La potencia contratada es el “límite” de electricidad (en kW) que puedes utilizar al mismo tiempo en tu vivienda, es decir, la cantidad de electrodomésticos que puedes estar utilizando al mismo tiempo.
La potencia contratada se puede comparar con el ancho de una carretera: cuantos más carriles tiene, más coches pueden circular al mismo tiempo sin problemas. De esta forma, si en una carretera estrecha intentan pasar demasiados coches a la vez, se produce un atasco.
En una vivienda ocurre algo parecido: si se ponen en marcha más electrodomésticos de los que permite tu potencia contratada, el sistema de protección actúa y se corta el suministro, lo que se conoce como que "te salten los plomos".
Por eso, la potencia contratada está muy relacionada con la comodidad en casa: si es demasiado baja para tus hábitos, es más probable que se interrumpa el suministro cuando enciendes varios electrodomésticos a la vez, como por ejemplo, cocinar con la vitro mientras funciona la lavadora y el microondas.
Dos potencias según el horario: una forma sencilla de ahorrar
Puedes contratar dos potencias distintas según la franja horaria de la potencia eléctrica: una para el periodo punta (P1) y otra para el periodo valle (P2). En la práctica, muchas comercializadoras ponen un precio de la potencia en P1 más caro que en P2.
Esto permite, contratar menos potencia en el periodo punta—cuando en general se consume menos al estar fuera de casa trabajando, por ejemplo— y más potencia en el periodo valle, concentrando ahí los usos más intensivos como lavadora, lavavajillas o carga de vehículos eléctricos.
También influye en lo que pagas porque una parte de la factura no depende de los kWh consumidos, sino de la potencia que tienes. Si contratas más potencia de la necesaria, normalmente no lo notarás en el día a día… pero sí cuando te llegue la factura a final de mes.
El término de potencia es la parte fija de tu factura de la luz. Es el importe que pagas simplemente por tener disponible una determinada potencia en tu vivienda, consumas mucha, poca o ninguna electricidad.
Este coste se calcula de forma sencilla: se multiplica la potencia contratada (en kW) por el precio diario del kW que marque tu contrato de electricidad (€/kW·día) y por el número de días del periodo facturado.
Por eso, aunque estés de vacaciones o apenas uses electricidad durante un mes, el término de potencia se seguirá cobrando íntegramente. Y, si tienes más potencia de la que necesitas, estarás pagando de más cada día sin obtener un beneficio real.
Es como si tuvieras un plan de datos móviles ilimitados pero a final de mes solo utilizas 4 GB. Pagas de más por algo que no aprovechas del todo.
En la mayoría de facturas aparece con nombres como “Término de potencia”, “Potencia contratada” o “Peaje de potencia” (a veces desglosado por periodos), y suele estar separado del término de energía, que es el que depende de los kWh que consumes.
El precio de la potencia contratada no es un número fijo universal: depende de si estás en el mercado regulado o en el mercado libre.
A continuación puedes consultar una tabla de precios por potencia contratada, diferenciando entre el mercado regulado y las principales tarifas del mercado libre.
En el mercado regulado, el precio del término de potencia está marcado por la normativa y publicado en el Boletín Oficial del Estado (BOE), y suele actualizarse cada año en función de los peajes de acceso y cargos eléctricos.
| Franja horaria | Precio (€/kW día) |
|---|---|
| Potencia en periodo punta o P1 (08h – 00h de lunes a viernes) | 0,0738 €/kW día |
| Potencia en periodo valle o P2 (00h – 08h, fines de semana y festivos) | 0,0019 €/kW día |
En este mercado, todos los consumidores con la tarifa PVPC pagan por cada kW de potencia contratada una cantidad establecida por ley, independientemente de la compañía regulada de luz con la que tengan contrato.
Por otro lado, en el mercado libre de la energía, son las propias comercializadoras quienes fijan el precio de la potencia contratada en cada una de sus tarifas.
Por ende, a continuación te mostramos el precio de la potencia contratada de las tarifas de luz más económicas de las principales compañías del mercado libre:
| Compañía | Oferta | Potencia punta | Potencia valle | Estimación Mensual |
|---|---|---|---|---|
 |
Tarifa Octopus Relax | 0,0950 €/kW día | 0,0270 €/kW día | 46,77 €/mes |
 |
Tarifa Fácil Luz | 0,0887 €/kW día | 0,0887 €/kW día | 46,83 €/mes |
 |
Tarifa Por Uso Luz | 0,1082 €/kW día | 0,0334 €/kW día | 49,18 €/mes |
 |
Tarifa One Luz | 0,0891 €/kW día | 0,0891 €/kW día | 49,44 €/mes |
 |
Tarifa Ahorro Plus | 0,0682 €/kW día | 0,0682 €/kW día | 51,44 €/mes |
Cálculos realizados con 4 kW de potencia y 270 kWh de consumo mensual. Precios con impuesto eléctrico, IVA y costes regulados incluidos.
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Ahora que ya sabes cuánto cuesta la potencia, vamos a lo práctico: qué ocurre cuando te quedas corto y se corta la luz al usar varios electrodomésticos a la vez.
Si en tu casa se va la luz cuando coinciden varios electrodomésticos, lo más habitual no es una avería, sino que estés superando la potencia contratada. Es decir, estás demandando más electricidad de la que tu contrato permite usar al mismo tiempo.
Esto suele ocurrir al cocinar con la vitro o el horno mientras funcionan otros aparatos de alto consumo, como la lavadora, el lavavajillas o el aire acondicionado. Cuando se supera ese “límite”, el sistema de protección actúa y corta el suministro para evitar daños en la instalación.
Si los cortes son frecuentes, es una señal clara de que tienes menos potencia de la necesaria. En ese caso, lo más habitual es subir la potencia de la luz para que se adapte mejor a tu uso real de la electricidad y evitar así que te salten los plomos.
Puedes comprobar tu potencia contratada en cualquier factura de la luz, normalmente en el apartado de “Datos del contrato” o “Término de potencia”.
También puedes consultarla desde el área de clientes de tu comercializadora o solicitándola directamente a tu distribuidora eléctrica.
No. La potencia máxima que puedes contratar está limitada por las características de tu instalación eléctrica y por lo que indique el boletín eléctrico (CIE).
Si quieres superar ese límite, será necesario actualizar la instalación y emitir un nuevo boletín.
La potencia contratada es el límite máximo de electricidad que tienes permitido usar a la vez según tu contrato. Marca cuántos electrodomésticos pueden estar funcionando al mismo tiempo sin que se corte la luz.
La potencia demandada es la electricidad que estás utilizando realmente en un momento concreto. Cuando enciendes varios aparatos a la vez (por ejemplo, la vitro, la lavadora y el horno), la potencia demandada aumenta.
Si en algún momento la potencia demandada supera la potencia contratada, el sistema de protección actúa y corta el suministro.
En muchos casos, sí. Si apenas coinciden electrodomésticos y tu consumo es bajo, una potencia elevada puede suponer un gasto fijo innecesario.
No directamente. La potencia contratada no cambia los kWh que consumes, pero sí determina cuántos aparatos puedes usar a la vez y cuánto pagas en la parte fija de la factura.
